Vuelvo al “tus aspiraciones no son las mías y las mías no son las tuyas”.
Cuando pienso en mi hermana, mis amigas, la gente que conozco ideo una vida para ellxs en la que son felices y viven en calma. Antes montaba el escenario, los personajes secundarios… Ahora ya no, porque me doy cuenta de que la felicidad en realidad reside dentro de nosotrxs, y que las circunstancias que nos vamos encontrando dependen de nuestras condiciones pasadas, presentes… Por lo que ya sólo les deseo que estén en calma, que tengan fuerza mental para afrontar cada uno de los momentos que les toque vivir y sabiduría para poder cultivar buenas causas.
No creamos saber qué es lo que le conviene a otra persona en términos de forma de vida, compañía…, porque no habitamos sus cuerpos, sus mentes, su ser. Y porque, aunque quizás esa sea la mejor opción igual no es la diseñada para esa persona, así que no intentemos controlar, proyectar, dirigir.
Aspiremos a que todos los seres seamos felices y a que encontremos las causas de la felicidad, sin importar el cómo, cuándo, ni dónde. Simplemente confiando en que estamos dónde debemos estar y en que todos vamos a llegar.
Muchas gracias y perdón,
Ojalá todos los seres seamos felices,
Ojalá cese el sufrimiento y sus causas,
Pueda yo hacerlo!