Hoy estaba en la playa quitándome las piedras de entre los dedillos de un modo muy consciente y atento y me he acordado de cuando tenía 14 años e iba a teatro. Teníamos en la clase atrezzo para escoger, y después investigabamos durante un tiempo, no sé definir si largo o corto, cómo nos sentíamos con ello, que emociones surgían en nosotrxs y a qué historias nos llevaban, qué se formulaba en nuestra mente…
15 años más tarde, en clases de kontak, me veía prestando atención a mi cuerpo, cuál era su cualidad: si era ligero, pesado…, si estaba disponible, si me encontraba en el eje, cómo reaccionaba ante algo inesperado si con disposición a la resolución o con evasiones, retirada, y un largo etcétera.
Me encanta ver cómo la atención plena o mindfullness no es algo que no haya estado presente a lo largo de mi vida, porque incluso cuando estudiaba y divagaba y me montaba historias de castillos y princesas llegaba un momento en el que era consciente que me había ido de la tarea y la retomaba.
Percibir que la sabiduría está en nuestro interior. Pararse en cada cosa que hagamos, estar en ese momento, con los ojos abiertos, preparados, dispuestos.
Muchas gracias y perdón,
Ojalá todos los seres seamos felices,
Ojalá cese el sufrimiento y sus causas,
Pueda yo hacerlo!