Cuando juzgamos a las personas no nos paramos a pensar qué es lo que han vivido, qué es lo que sienten, qué es lo que les ha llevado a ciertos lugares, qué es lo que les hace decir ciertas cosas, comportarse de ciertas maneras, etc. Somos miles y miles de humanos en el planeta tierra, con diferentes creencias, estilos…, porqué creer que mi verdad es la única, porqué creer que no hay más posibilidades de operar, de ser.

Por todo ello es importante que cuando alguien se sienta y nos abra su corazón le escuchemos sin juzgar, sin opinar, que simplemente escuchemos, no importa si viene desde el corazón o desde la mente el speech, lo que importa es que esa persona, por algún motivo, ha decidido confiar en ti, por lo que se cuidadosx y respetuosx con la información, intenta estar presente, abrazar a tu ser y dejar atrás a ese yo tan aprendido y trabajado que tenderá a entender lo que le están contando desde esa mente limitada y condicionada.

Escuchar es abrir tu corazón y abrazar a esa persona que tienes delante, sin palabras, sin gestos, simplemente con presencia, con compasión, entendiendo la naturaleza última de todos los seres.

Muchas gracias y perdón,

Ojalá todos los seres seamos felices,

Ojalá cese el sufrimiento y sus causas,

Pueda yo hacerlo!