A veces nos excusamos por sentir. No queremos enfadarnos, o sentir envidia,o nostalgia, o amor por alguien que no nos corresponde, o ira al presenciar una injusticia, o quizás resentimiento y añoranza.
Durante un tiempo lo enmascare, para mí y para lxs demás, todo aquello que etiquetaba cómo no positivo, cómo no «inspirador» o elevador de la energía lo rechazaba, no por un intento de disimular, ni de negar, sino más bien porque creía que era lo más beneficioso.

A día de hoy me encuentro ante mí en el espejo sabiendo que muchas de esas emociones aparecen en el reflejo y las abrazo igual que a las otras porque sé que están ahí pero que no son yo, sino la presencia de mi mera humanidad.
Muchas gracias y feliz día!
Ojalá todos los seres seamos felices,
Ojalá cese nuestro sufrimiento y sus causas,
Podemos hacerlo!