El arte de bailar

Recuerdo las sevillanas con mi hermana, después los festivales del colegio y sus coreografias, y Janet y sus imposibles pasos. Hoy hablaba con mi hermana de que creo que el baile me ha salvado la vida, y la verdad es, que cuando bailo, sólo hay presente y presencia. Empieza tímido todo y según pasan los acordes el cuerpo se va expandiendo y llegando a los confines de la tierra.

En estos días me llegan vídeos de creaciones pasadas, tiempos bailando ocho horas al día, vergüenza máxima pero retos aceptados. Me recuerdo en el monasterio de Kopan subiendo a la azotea y bailar, en la noche y el silencio, dónde no existía ni un apice de preocupación. También me observo en las cocinas, pistas de baile inigualables, sube y baja, venirme tan arriba que el cuerpo me lo recordaba al día siguiente. En compañía, sóla, todo está bien mientras bailas.

No sé cuál será tu fuente de poder pero te invito a visitarla todos los días sin excepción.

Muchas gracias y feliz día!

Ojalá todos los seres seamos felices,

Ojalá cese nuestro sufrimiento y sus causas,

Podemos hacerlo!

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.