Es bueno tener localizados nuestros anclajes; pueden ser en forma de personas mediante un café o una llamada, tal vez un libro, un lugar, una comida, una canción, un estiramiento concreto, una ropa, olor, caricia, un baile.
Hay muchos anclajes, todos los que encontremos para nosotrxs. No nos sirve coger el de otra persona, hay que pararse y descubrir qué son esas pequeñas cosas que nos devuelven a la tierra y a su vez, al cielo infinito. Esas pequeñas cosas son las que nos devuelven el aire cuando lo hemos perdido o anda entrecortado.

Muchas gracias y feliz día!
Ojalá todos los seres seamos felices,
Ojalá cese nuestro sufrimiento y sus causas,
Podemos hacerlo!