Y tras idas y venidas, vuelves a tu paso natural. Hoy caminaba tranquilamente cuando me he dado cuenta de lo precioso que es andar sin prisas, sin mirar el reloj, simplemente fluyendo con el sentir de cada instante.
Reconozco el mundo en el que vivo y dónde me encuentro metida, por mis elecciones sin duda, pero gracias a ello también puedo apreciar lo valioso de cada segundo, de volver a tí y estar ahí, de sentir el aire en tus mejillas, de ver a quién camina a tu alrededor, de poder parar.
La vida es un inmenso regalo, y aunque no siempre pueda ir, aparentemente, a mi ritmo, internamente puedo encontrarme dónde quiera. Otra elección vamos.

Muchas gracias y feliz día!
Ojalá todos los seres seamos felices,
Ojalá cese nuestro sufrimiento y sus causas,
Podemos hacerlo!