Ayer íbamos por el monte cuando pasaron dos niños con un padre y una pareja con un perro. Uno de los niños iba detrás del perro a tocarle, lo consiguió y le acarició el lomo. El perrillo se dió la vuelta y se acercó un poco más al niño, por lo que éste se giró y se sentó en el suelo. Cuando vio que se había ido se volvió a levantar y comenzó de nuevo el proceso.
Me encanta ese intento del niño de salir de la situación, yo me siento y ya pasará todo. A veces luchamos, buscamos otras vías, damos vueltas y vueltas, y lo único que no probamos a hacer es a permanecer y dejar que la tormenta pase. A veces nos impacientamos y no concedemos a la vida sus tiempos, sus procesos. Bendita nuestra humanidad!

Muchas gracias y feliz día!
Ojalá todos los seres seamos felices,
Ojalá cese nuestro sufrimiento y sus causas,
Podemos hacerlo!